ABSORBENTES PARA QUÍMICOS Y LÍQUIDOS PELIGROSOS

¿Qué es un absorbente?

Un absorbente industrial permite absorber las fugas y derrames accidentales de líquidos y sustancias contaminantes como grasas, aceites, hidrocarburos o productos químicos, con el fin de garantizar seguridad e higiene en el trabajo y de contribuir en la prevención y protección del medio ambiente.

Son muchos los factores que se deben tener en cuenta cuando hablamos de escoger el mejor absorbente y el más adecuado para tu empresa. El principal es saber identificar la situación: ¿para qué voy a necesitarlo?

Puede que sea necesario para prevenir vertidos que se van a llevar a cabo de forma inevitable, para colaborar en la manutención de espacios concretos o de rincones que se ensucian fácilmente, o para intervenir en un accidente ocasional. En función de las sustancias derramadas y de la situación en la que se originen, se recomienda el uso de uno u otro tipo de absorbente industrial.

Lo más importante es disponer de ellos cuando sea necesario y saber utilizarlos como medida preventiva y de mantenimiento. En caso de que haya algún vertido, la intervención pueda ser lo más rápida y eficaz posible.

Tipos de absorbentes ante vertidos o fugas

Según la sustancia que se quiera absorber, distinguimos principalmente 4 tipos de absorbentes industriales. Estos son:

• Absorbentes universales
• Absorbentes para hidrocarburos
• Absorbentes para vertidos en el agua
• Absorbentes para químicos

Hoy nos centraremos en estos últimos, los absorbentes para químicos y líquidos peligrosos. Estos absorbentes están pensados para derrames de líquidos peligrosos. Fabricados en fibras sintéticas e inertes, principalmente de polipropileno. Son ligeros y no generan polvo. Tienen una gran capacidad de absorción que minimiza la generación de residuos que deben desecharse.

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Cualquier líquido peligroso o sustancia química debe tratarse con el máximo respeto porque puede ser una amenaza para las personas y para el medio ambiente. Al manejar este tipo de elementos, es importante que el espacio o la zona de trabajo esté perfectamente acondicionada y cuidada ante accidentes, fugas o derrames.

Existen diferentes formatos de absorbentes se debe elegir el que mejor se ajuste a las necesidades del ambiente de trabajo.

• Cordones: se utilizan para rodear y contener derrames, evitando su expansión.
• Almohadillas: se utilizan para la absorción de grandes cantidades de producto y para controlar el derrame en el origen.
• Alfombras: ideales para utilizar en pasillos cerca de máquinas que presentan fugas. Ayudan a mantener limpios los suelos y son eficaces para limpiar el calzado sucio.
• Rollos: Diseñados para cubrir grandes superficies. Se utilizan también para cubrir toda la superficie del derrame o como medida de precaución en zonas en las que se puedan producir grandes derrames.
• Hojas: son un formato muy flexible y están pensadas para actuar de forma rápida y sencilla. Muy eficaz en espacios confinados o para derrames pequeños.
• Multiformato: Resulta muy práctico y versátil pues combina cuatro formatos diferentes en una sola presentación. Si se utiliza de forma cerrada actúa como cordón; si se desdobla resulta en una almohadilla; y si se desdobla del todo actúa como una hoja o rollo.

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Beneficios de los absorbentes químicos

Están diseñados para absorber una gran variedad de líquidos tales como ácidos, bases, hidrocarburos, disolventes, etc. Reducen la necesidad de almacenar productos diferentes para actuar en situaciones de emergencia.

• Seguridad en el lugar de trabajo.
• Inmediata respuesta a derrames de productos químicos.
• Rápida y efectiva contención y limpieza.
• Adecuados para la gran mayoría de productos químicos.
• Fáciles de desechar.